domingo, noviembre 28, 2010

El principal objetivo lingüístico de la Generalitat.

El objetivo principal de la Generalitat (sí de esta Generalitat encabezada por el PSC, que poco tiene que ver ya con el PSOE) en materia lingüística es que la única lengua común de los catalanes sea el catalán.

No es una percepción, o un juicio de intenciones. Es el objetivo principal declarado por la misma Secretaría de Política lingüística. 

"Iniciem la segona dècada del segle XXI amb un objectiu prioritari, el de consolidar el català com a llengua comuna d'ús públic a Catalunya"

“La Secretaria de Política Lingüística del Govern de Catalunya treballa fonamentalment per aconseguir que el català (i l’occità) sigui una llengua de ple ús dins el seu propi territori, i esdevingui la llengua pública comuna de Catalunya, com a factor fonamental per garantir la cohesió social del país.”

Dicho objetivo, de llegar a buen término, supondrá la desaparición del castellano como lengua propia de gran parte de los catalanes y el fin de la realidad bilingüe de Catalunya. La ingeniería social para conseguirlo ya está puesta en marcha. El éxito del intento depende de la pasividad o no de los castellanoparlantes en Catalunya.

sábado, noviembre 27, 2010

El PSC bilingüe.

No pienso dar mi voto a un partido que desde la Generalitat ha actuado durante 7 años excluyendo sistemáticamente al castellano y que tiene la cara dura de que el primer envío que me hace bilingüe sea para pedir mi voto.

martes, noviembre 23, 2010

Sanciones por información deficiente y multas lingüísticas.

Es tremendo ver como ante la denuncia por la existencia de las multas lingüísticas, nuestros políticos responde que hay también sanciones por no usar el castellano (ver el debate a 6 de TV3). Es decir, justifican la injusticia que ellos cometen contra sus propios ciudadanos, por una supuesta injusticia cometida por los políticos de Madrid (que también les incluyen a ellos, y en especial al PSC que están el en gobierno). Es como si el padre que maltrata a su propio hijo lo considerada legítimo porque su padre le maltrató antes a él.

Pero es que además engañan. Porque las denuncias a las que refieren, no son "multas lingüísticas" sino multas por "deficiencias en la información". Es decir, por no proporcionar una información obligatoria. Mientras que las multas "lingüísticas" lo son por no usar el catalán cuando se está utilizando otra lengua, aunque esa información no sea obligatoria. La consideración de "multas lingüísticas" diferenciadas de las "multas por deficiencia en la información" es la misma que usa la Generalitat. Y según eso, no existen multas lingüísticas por no usar el castellano.

En todo caso, sobre las sanciones sobre información deficiente, se puede discutir la forma en que esas sanciones no acaben secundariamente discriminando el uso del castellano. Es muy fácil, o consiguiendo una modificación de la ley que implique que haya la opción de dar esa información obligatoria en cualquiera de las dos lenguas oficiales, o con una ley, que está en la mano de la Generalitat, que obligue en los mismos casos a utilizar también el catalán.

Esto último es lo que se ha ido haciendo, de facto. Y de hecho se habla mucho de esas "120 leyes" que hacen etiquetar en castellano (informaciones obligatorias) y se olvida que si no todas, la mayoría de ellas tienen ya (en especial desde que se ha aprobado la reciente ley del consumo) su contrapartida que obliga a etiquetar en catalán. A ello hay que sumar las que obligan a usar el catalán, no por motivos informativos, sino por motivos "estéticos", de salud pública lingüística.

Es una pena que nadie se haya entretenido a contarlas.

viernes, noviembre 19, 2010

¿Alguien se acuerda de los señores Millet, Alavedra y Prenafeta?

¿Por qué ningún partido político habla en esta campaña de los casos tan evidentes de corrupción como el caso Palau o el Pretoria?
Cuando estalla el “Caso Palau” el interés del establishment fue desvincularse como fuese de una historia que evidenciaba el funcionamiento oligárquico que se esconde bajo la senyera. Lo primero fue una campaña para hacer creer que se trataba de un vulgar caso de “choriceo” sin implicaciones políticas. La empresa parecía imposible, pero nada es imposible si controlas los medios que informan sobre ello. Al final nos vendieron eso, para nada valía la pena recordar que entre los patronos del Palau estaban la flor y nata de nuestros dirigentes, ni las relaciones de Millet, ni recordar el G-16, ni la financiación de la fundación de Convergència, ni el pago de las deudas de Àngel Colom al ingresar en CiU, ni cómo fueron ignorados, por parte del Parlament, los avisos de la Sindicatura de cuentas de las irregularidades...

El caso es que en plena operación disimulo del affaire Millet estalla el “Caso Pretoria”. Las detenciones de altos cargos de CiU junto a otros del PSC en un mismo caso, con un preludio profético de Pujol el día anterior amenazando con “tirar de la manta” y con aquello de que si hablase "tots faríem una mica de ferum" eran ya demasiado. Pero enseguida encontraron respuesta. Hablaron de desafecció de la ciudadanía con la política, montaron el cortafuegos del "no todos somos iguales" y salieron con lo de que no nos preocupásemos, que ya tenían la solución. Y esta era una regeneración política que se iba a demostrar por vía de la "llei electoral".

Catalunya es la única comunidad autónoma que no tiene una ley electoral propia, esto es, que se rige aún por la ley española. El nacionalismo de la diferencia (aquel que hace que para reformar la distribución provincial se busque un nombre propio del medievo, "Vegueria", todo sea por no parecer españoles) tiene estas cosas.

Pero en fin, la "ley electoral" iba a solucionar lo de la "desafección política" y por arte de magia desaparecerían los problemas de la corrupción con ello. No se sabe muy bien por qué. Porque implícitamente, al relacionar ley electoral y corrupción, se está afirmando que la corrupción proviene del "nepotismo" (les traiciona el subconsciente) si no, si la corrupción política no está generalizada, no se ve por qué cambiando la proporcionalidad del voto, ha de disminuir la corrupción. Pero si existe el nepotismo, cosa evidente y que lleva a esta asociación tácita, entonces sólo se puede disminuir si es a través de las listas abiertas. Pero tal alternativa quedó descartada por todos desde un principio.

La cuestión es que, ni siquiera esa reforma de la ley electoral que seguía dejando todo el poder a los aparatos de los partidos, y ninguno a los ciudadanos, se va a llevar a cabo. No hay acuerdo y el proyecto de reforma se abandona. Era algo que muchos ya sabíamos, volver a sacar el tema de la ley electoral no era más que una excusa para tapar los casos de corrupción, para justificar que se estaba haciendo algo al respecto. ¿Qué se estaba haciendo? Nada, hoy lo vemos.

lunes, noviembre 15, 2010

Pedir un "café amb llet".

Hay ahora quien justifica la discriminación contra el castellano, en el hecho de que se puede entrar en un bar -alguna vez se ha dado- y el camarero no entenderte cuando le dices "café amb llet".

Y eso sirve para justificar la imposición lingüística. Pero ni la obligatoriedad de rotular en catalán hace que el camarero aprenda catalán, ni lo hace la inmersión lingüística, pues el camarero ya no va a la escuela, ni lo hace la exclusión del castellano de las instituciones.

Queda así claro que no entender lo que es un "café amb gel" no es ningún argumento, sino una excusa emocional que lo que busca es el enfrentamiento. 


miércoles, noviembre 10, 2010

Puigcercós se declara partidario del monolingüismo social.

Antes se podía llegar a pensar que cuando se criticaba a la ultraderecha españolista, y les llamábamos "fachas", "intolerantes", etc... era por su imposición de “Un modelo de sociedad, un solo pueblo y una sola lengua"...

...pero resulta que no, que lo malo no era la idea, sino el color de la bandera:

Joan Puigcercós, candidato a presidir la Generalitat, ha declarado que lo que defiende ERC es “Un modelo de sociedad, un solo pueblo y una sola lengua”.

“no volveremos a tener una Cataluña monolingüe como hace 100 años, por lo que no nos interesa el término lengua materna, nos interesa el de lengua común“. Lengua que por supuesto, solo puede ser una, y ha de ser “la propia”, esto es, la suya propia, claro.

De modo que el "español" es facha, intolerante y derechista haga lo que haga. El nacionalista catalán, en cambio, por más dictatorial y totalitario que sea, por más que atente contra la libertad, es siempre un "demócrata", "progresista" y "tolerante"...

Es increíble hasta dónde ha llegado la perversión del significado de las palabras que vivimos en nuestra sociedad.

Recordar que Puigcercós, es el mismo que llamó racista y falangista al Defensor del Pueblo (el militante antifranquista Enrique Múgica, que pasó por ello varias veces por la cárcel) por recurrir la ley que imponía a los inmigrantes el catalán como primera lengua de acogida, el mismo que llamaba a crear una legalidad propia "catalana" -o sea,  a saltarse la legalidad si hace falta- si el Constitucional recortaba el Estatut o el mismo que ha criticado el "laicismo de los falsos progresistas"  reivindicando a su vez la raíz cristiana de Catalunya.

viernes, noviembre 05, 2010

El Papa en una nueva ofensiva contra el catalán.

Viene el Papa a Barcelona y, ¡oh, milagro de los milagros! lo que para el resto de los mortales es ir "contra el catalán" para él es no sólo favorecer sino prueba de una "gran sensibilidad". Políticos y comunicadores están que botan de alegría por las muestras de catalanismo que se le suponen al hecho. Incluso diversos políticos catalanes han publicado un Manifiesto de agradecimiento al Papa, por la visita y la utilización del catalán (entre ellos miembros de una pretendida izquierda, ERC y PSC).

Efectivamente, el Vaticano ha confirmado que, en su visita, el Papa usará también el catalán (junto a castellano y latín) ¡...no hay quien les entienda!, en esto el bilingüismo (trilingüismo en este caso) es favorecer el catalán y hacer justicia. Sin embargo cuando se pide el mismo trato bilingüe en las instituciones catalanas (por ejemplo en el reciente caso del Reglamento de uso del catalán en el ayuntamiento de Barcelona), se considera que eso va "contra" el catalán, cuando no contra la "convivencia".

Sucede esto por la misma idiosincrasia del nacionalismo. El nacionalismo repudia la neutralidad y la igualdad en derechos. El nacionalismo se basa en la arbitrariedad. Por ello cuando se da un paso en favor de las propias tesis siempre es aplaudido, aunque el paso se quede corto o se pase en cuanto al justo medio. Por ello cuando se da un paso en contra de su arbitrariedad, aunque esto lleve a la justa imparcialidad, siempre es considerado un ataque intolerable a su "derecho" e interpretado como resultado de el odio que se siente hacia su identidad.